Este es el regalo más grande que todo ser humano
recibe al nacer: "la VIDA"...
y, sin embargo, al crecer, desarrollándose
física y mentalmente a través de los años y haciendo frente a las
circunstancias diversas de salud, trabajo y familia por las que toda
persona atraviesa en un momento u otro de su existencia,
¿se puede decir s i e m p r e:
VIVA LA VIDA?
A veces es difícil mantenerse positivos, con ilusión de vivir momentos gratos, y decir de todo corazón: gracias a la vida que me ha dado tanto...
mas bien tendemos a encerrarnos en nosotros mismos
convencidos de que somos unos pobrecitos sin suerte, sin esperanza, sin
porvenir... y un día tras otro se suceden amargamente, encerrados en nuestro
caparazón, convencidos de que no somos nada, ni queridos ni aceptados por
nuestro alrededor porque nos falta de todo para ser felices...
Estos días pasados tuve la suerte de leer en unas
revistas dos historias reales, ejemplos vivos de la posibilidad de vivir
llevando en nuestra mochila de viaje los pesos de las dolencias, mal
formaciones, soledad, falta de satisfacciones materiales, y mucho más,
concentrándonos en todo lo malo que nos sucede sin tan solamente abrir los ojos
hacia el exterior para ver lo que sucede e imaginar como participar de forma
tal que lo desagradable, las imperfecciones e imposibilidades puedan aportar
cierta calidad de vida sin olvidar de ofrecer una mano al que la necesita.
Un joven de 18 años nació con una mal
formación en el brazo derecho impidiendo que
su antebrazo y mano creciera
normalmente.
Desde los 6 años de edad su ingenio y
creatividad va en aumento realizando maquetas de Lego y
hace muy poco tiempo que su padre lo
sorprendió desmontando una maqueta de un helicóptero y empezando a
crear con la piezas
del mismo una prótesis articulada para
su brazo!
Trabajó con mucho esmero con ello hasta
que terminó su invención que consiste en un brazo con una mano y todo; ha
hecho posible que al mover el brazo, la mano se abre y se cierre,
permitiéndole así recoger objetos ligeros.
David siempre ha sido un verdadero
luchador porque ama la vida a pesar de su desventaja física y su único sueño
ahora es poder llegar en el futuro a tener una empresa que fabrique prótesis
que se puedan aplicar de forma personalizada a cada paciente.
Qué lección tan grande da este joven a
sus compañeros de estudio ofreciendo charlas que no solamente les deja
impresionados sino que también les da una lección:
¡Viva la vida!.
(Y, seguidamente, continúo con la
síntesis de mi
segunda lectura que quiero compartir con mis lectores)
Se trata de un octogenario
que durante muchos años es voluntario en un hospital de niños en una ciudad norte
americana y acude dos veces por semana a la unidad de neonatos para
simplemente abrazar bebés y cantarles nanas, lo que es muy beneficioso para
ellos. A la vez, puede ofrecer a los padres de los neonatos un
"respiro" para cuidar del resto de sus hijos en casa o porque en
muchos casos, los familiares tienen largas horas de viaje de ida al hospital y
de regreso a su casa y no pueden dejar a sus hijos solos tantas horas para
ocuparse totalmente del bebé internado en el hospital.
El abuelo de la UCI (como lo llaman las enfermeras) nos cuenta que mucha gente no comprende porqué a sus 82 años pasa tanto de su tiempo con estos bebes que a menudo le vomitan encima...pero él afirma que le da mucho placer tener a un recién nacido en sus brazos porque además, acunarles es terapéutico y les calma mucho.
esta
experiencia?
Hay tantos casos de personas mayores que aún estando capacitadas para hacer felices a otros eligen encerrarse, sin ver ni oír las necesidades a su alrededor... evitando así dar más sentido a su existencia y a la vez vida útil a sus años...
QUERER... ¡ES
PODER!